
Desde Quepos a Uvita, esta vez tomamos a un autobús directo. Después de 4 horas de viaje, llegamos a Bahía, a pocos metros de la playa, la ciudad se reduce a una calle principal, un supermercado y dos restaurantes.
Es un hotel de estilo motel, muy limpio y la gente super amable.
Gracias a él propriatario, nos reservamos para el día siguiente una excursión para ver las ballenas y nos las arreglamos para conseguir gratis para las niñas.
Hemos hecho un recorrido por la inmensa playa de arena negro de Uvita, la vista es hermosa, sólo hay que tener cuidado de no pasar por el río debido a los cocodrilos.
Por la noche comimos en uno de los dos restaurantes en los que tomamos todas nuestras comidas, porque, de hecho, es casi el mismo precio comer fuera que comprar en el supermercado.
Al d...
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